Bolivia alcanza primer lugar sudamericano en Olimpiada Mundial de Robótica
El equipo Tarija de Bolivia obtuvo el primer lugar en Centro y Suramérica en la Olimpiada Mundial de Robótica, en la que participaron 85 equipos de 65 países. Los bolivianos ocuparon, asimismo, el segundo lugar en toda América Latina y el puesto número 23 a nivel mundial.
La Olimpiada Mundial de Robótica (WRO, por sus siglas en inglés) 2019, que se realizó del 8 al 10 de noviembre en Györ (Hungría), acogió “alrededor de 3.000 participantes -el mayor número hasta ahora- de entre los 10 hasta los 25 años, provenientes de 65 países”, dijo Luis Ortega Zeballos, tutor del equipo tarijeño. El tema central de la WRO 2019 fue “Ciudades inteligentes”.
“Todos los proyectos estaban orientados a resolver una problemática cotidiana, que permita convertir alguna actividad a un proceso automatizado en una ciudad”, comenta Ortega, quien también es profesor de física del colegio Hermano Felipe Palazón (Tarija).
Para las ciudades inteligentes se tenían que considerar “nuevos conceptos, nuevas ideas y nuevas tecnologías que ayuden a construir las ciudades del futuro”, acota Marco Antonio Tejeda, tutor del equipo paceño.
Delegación boliviana
En esta versión, la delegación boliviana estuvo conformada por dos equipos -uno de Tarija y otro de La Paz-, cada uno integrado por dos estudiantes y un tutor.
Los representantes fueron elegidos tras un proceso de selección entre los ganadores a la Olimpiada Científica Estudiantil Plurinacional Boliviana.
Marco Borda Wiegert (19 años) y Horacio Lizárraga Cabrera (17), junto al tutor Luis Ortega conformaron el equipo tarijeño que logró un buen lugar en el certamen mundial. Ellos participaron en la categoría regular avanzada.
“Me siento muy feliz y orgulloso por el resultado que conseguimos. Al fin todo el trabajo que hicimos dio sus frutos, después de tanto tiempo invertido y varios sacrificios realizados”, dice Lizárraga.
Señala que llegando al puesto 23 de 83 equipos participantes quedaron como “el segundo mejor país de todo América, quedando un puesto más abajo que el equipo de México, lugar que ningún equipo boliviano logró”, comenta Lizárraga, estudiante del colegio Hermano Felipe Palazón.
Borda considera que lograron un buen lugar, pero que tenían grandes posibilidades de conseguir una mejor posición, “los nervios los traicionaron”, dice.
A nivel nacional “cada año se nota una tendencia de crecimiento en participantes de robótica y los equipos que nos representan en competencias internacionales están demostrando cada vez más capacidad de trabajo y talento con mucho ingenio”, explica Ortega, quien también es tutor de equipos olímpicos en las áreas de física, astronomía e informática.
Señala que los países que figuran entre los 10 primeros lugares trabajan de manera intensa una mayor cantidad de horas en clubes o centros dedicados a la enseñanza de la robótica.
“A pesar de estas diferencias los equipos bolivianos lograron alcanzar niveles muy apreciables y mostraron una evolución significativa”, dice Ortega.
Panamá busca ser la sede de la Olimpiada Mundial de Robótica del 2023 https://t.co/HTx8BeIlnS vía @RCENI24
— RCENI (@RCENI24) November 10, 2019
El otro equipo que también participó del WRO 2019 estaba conformado por los paceños Manuel Mamani y Josué Ortega, ambos de 15 años y estudiantes del Colegio Vida y Verdad de La Paz. Estuvieron guiados por Tejeda, ingeniero de sistemas, y participaron en la categoría regular intermedia.
Tejeda señala que aunque no llegaron a un buen lugar “fue una buena experiencia, que seguramente servirá al equipo para los siguientes desafíos”. Los participantes comentan que el robot tuvo fallas al momento de la realización de las pruebas.
Para la competencia de robótica, los participantes emplean conocimientos de diversas disciplinas, entre ellas: informática, matemática, razonamiento, física y mecánica. “A lo que se tiene que sumar la imaginación y creatividad”, dice Josué Ortega.
Borda acota que también se requiere tener paciencia y ser autodidacta, pues él aprendió muchas cosas a través de la plataforma YouTube.
¿Qué hace falta?
“Deberíamos tener a los equipos clasificados el mes de enero, a más tardar febrero, para que empiecen su preparación hacia el mundial con el tiempo suficiente, como lo hacen los otros equipos a nivel internacional”, dice Tejeda respecto a lo que hace falta para potenciar más la robótica.
Josué Ortega señala que hace falta más conocimiento y capacitación en robótica: “Vi en el mundial un montón de ideas nuevas y formas de hacerlo mejor, eran más complejas, pero eran mejor”.
Borda explica que se hace necesario contar con profesores especializados en robótica que capaciten en programación y, asimismo, preparación mental para que los nervios no les jueguen malas pasadas.
(Con información de Los Tiempos)
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