Organismos y empresas junto a los camagüeyanos en recuperación. Foto: ACN

Una mejoría en las condiciones del tiempo permite que los camagüeyanos, acompañados por trabajadores de organismos y empresas, comiencen las acciones de recuperación tras las afectaciones de las crecidas en esta ciudad y otras localidades del territorio, debido a las intensas lluvias de los últimos días.

Reporta la ACN que en la urbe capital agramontina, cuyos dos grandes ríos (Hatibonico y el Tínima), y varios arroyos, se desbordaron al amanecer del jueves a causa de los significativos acumulados de precipitaciones, reciben atención pobladores de comunidades que sufrieron inundaciones, algunas familias sin grandes daños retornan sus pertenencias resguardadas en lugares seguros, y transcurren tareas de saneamiento, podas y la higienización de la localidad.

La población del barrio situado en prolongación de la calle Palma, donde se juntan el Hatibonico y el Tínima, perteneciente a la circunscripción 44 del Consejo Popular Previsora, fue una de las que más sintió los efectos de la furia de las corrientes, pues según relatan lugareños, nunca el agua había llegado a los niveles vistos.

Residente en prolongación de Palma, Rogelio Enrique López Estévez, recibió en su casa 50 coterráneos con riesgos y ayudó a resguardar bienes y equipos electrodomésticos, lo cual está dispuesto a hacer ante situaciones difíciles como la de estos días.

Resaltó la conducta de los jóvenes que dieron su paso al frente y apoyaron, y el trabajo del grupo comunitario, la Defensa Civil, los obreros de la Geominera y autoridades de la provincia, con el objetivo de salvaguardar primeramente la vida de las personas y los bienes de las familias.

Por su parte, Juan Ramírez Tamayo, delegado de la citada circunscripción, quien hace unos 40 años vive en esa comunidad, la inundación rebasó los límites, pues hubo casas que con la crecida se taparon completamente.

El grupo comunitario, manifestó, ha estado aquí con la gente para ayudarlos en todo lo que haga falta, primero en el traslado de vecinos hacia lugares altos y seguros, al igual que las pertenencias y ahora en las tareas de recuperación.

Lo más importante, consideró, es que no hemos tenido que lamentar pérdidas de vidas humanas.

En esa zona reportan 58 afectaciones en casas, de ellas seis derrumbes totales y un número considerable de colchones deteriorados, a partir de lo cual accionan en la valoración de esos daños con los especialistas del sistema de la Vivienda y trabajadores sociales, para ofrecerle respuesta a los distintos casos.

Un intenso quehacer ha habido allí, particularmente en el momento de la crecida cuando hubo que proteger más de 300 personas, dijo a la prensa Beatriz Rodríguez Fernández, coordinadora de programas del Gobierno Provincial.

Con ayuda de integrantes de la Formación Especial de la Empresa Geominera Camagüey, que ponen sus recursos y medios de transporte en función de la vuelta a la normalidad, se realizan labores de limpieza, higienización, chapea y recogida de escombros.

Gustavo Pons Vázquez, chofer de un camión de carga de la Unidad Empresarial de Base de Aseguramiento y Transporte, explicó que con este transporte cargan mercancías y todo lo necesario, para contribuir a que la población de aquí resuelva sus problemas.

Relató que estaban en la zona efectuando las faenas requeridas ante el peligro de la inundación, y alrededor de las 2:00 am del día 8 empezó a subir el nivel del agua, algo impresionante, pues el agua llegó hasta el cuello de las personas.

En las faenas de recuperación el sector de Comunales es vital, de ahí que se concentren los esfuerzos en las zonas impactadas por las inundaciones, a través de la recogida de desechos sólidos que quedaron en la superficie.

De igual manera, el organismo labora de conjunto con los combatientes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y varias formaciones ingenieras para la limpieza de micro vertederos, y otras labores de saneamiento necesarias.

(Con información de la ACN y medios provinciales)