Mujeres de la guerra: Las Marianas de Cuito Cuanavale (+ Video)
Por Javiel Fernández Pérez
Fotos de Roberto Garaicoa
Fecha de emisión: 14 de septiembre de 2018
La Mesa Redonda del pasado viernes 14 de septiembre reunió a la Licenciada Celia Duany Lambert y a la Doctora Odalys Chala Ortiz, dos de las mujeres que siendo muchachas de alrededor de veinte años de edad participaron como parte del equipo médico en la batalla de Cuito Cuanavale, durante la guerra con participación cubana en Angola.
Al iniciar el espacio, la periodista Arleen Rodríguez Derivet auxiliada de varios materiales audiovisuales, hizo un recuento de lo que fue la batalla de Cuito Cuanavale y el papel jugado por los 27 médicos y 45 sanitarios y enfermeras que participaron en ese combate, entre ellos, seis mujeres.
Una de las protagonistas, graduada en 1983 como Licenciada en Estomatología, Celia Duany Lambert, fue la segunda mujer en llegar a Cuito Cuanavale, contó que no existían condiciones allí para su estancia pero que ellas tenían un mínimo de entrenamiento y decidieron participar por voluntad propia, incluso a sabiendas de que las mujeres no estaban autorizadas a esta r en ese sitio por el teatro de operaciones militares existente.
A la pregunta de Arleen de ¿qué hace una técnica en estomatología en tiempo de guerra?, Celia respondió que en esas circunstancias el sillón de estomatología se quita, por lo que ella pasó un curso de enfermería de salón para trabajar con cirujanos y ortopédicos en una unidad quirúrgica bajo tierra.
Por su parte, la Doctora Odalys Chala Ortiz, manzanillera de nacimiento, tenía 24 años cuando llegó a Angola en el año 1988, luego de trabajar como anestesista en el hospital Celia Sánchez Manduely y dejar detrás una hija de apenas tres años de edad.
Contó la experiencia del fallecimiento de su madre mientras ella estaba en Angola; ante tal suceso ella vino a Cuba y decidió regresar a Angola dejando su hija encargada a su cuñada.
Odalys dijo que ambas invitadas a la Mesa estuvieron primero en la ciudad de Menongue Menongue, conocida como la ciudad de los morteros y la finca del miedo porque casi todos los días hacían atentados incluso en el puesto médicos.
Desde Santa Clara entró a la Mesa la historia de vida de la Doctora Adelaida de la Caridad Fleites Pérez, quien recordó que fue la primera mujer en llegar a Cuito Cuanavale cuando tenía apenas 24 años y rememoró el peso de la palabra caravana para todos quienes estuvieron en Angola, situaciones que la pusieron a prueba y la hicieron crecerse junto a zapadores, pilotos, la infantería y los soldados terrestres.
¿Nunca tuvieron miedo?
Celia comentó que desde su nacimiento en La Habana nunca había sentido miedo, pero que a veces a su llegada los mismos muchachos de la tropa por broma le echaban miedo; pero estaban en un lugar de constante hostigamiento donde había que estar preparado para cualquier situación, “tenía solo 21 años y me enfrenté a aquello con el valor que llevaba, había tantas personas que me daban apoyo que no había por qué sentir miedo.
Dijo que el hospital de campaña donde trabajaban estaba formado de contenedores soterrados y constituido por salón de operaciones y espacio para la recepción y clasificación de heridos y dotado de condiciones que permitieron salvar la vida a todos los que llegaron a atenderse, entre ellos, cubanos, miembros de la FPLA y civiles.
“Una vez que los clasificábamos los pasábamos por orden de prioridad hacia el salón de operaciones y pasábamos el día entero y parte de la noche operando”, agregó Celia.
“Todos nos llevábamos como hermanos, tenemos magníficos recuerdos de las personas independientemente de que muchos no nos hemos visto durante años”, concluyó.
Odalys apuntó que un 14 de febrero estaban siendo hostigados en Cuito, a la espera de lo que podía acontecer y atendiendo a los heridos que llegaron ese día los que fueron salvados.
En la actualidad
Celia es actualmente Licenciada en Estomatología, atendió a los niños de Chernóbil durante su recuperación en Cuba y tiene dos hijas, una de 26 y otra de 17 años a las que trata de darle todo el amor del mundo y Odalys cumplió otras misiones internacionalistas en Nicaragua, Venezuela y Mozambique.
Ambas concluyeron que Cuito Cuanavale fue una escuela para todos los que estuvimos en aquel lugar y que el tesoro mayor son los compañeros que aunque los han dejado de ver son amigos para toda la vida.
La primera en llegar a Cuito fue Barbara Camejo a mediados de enrdo, junto a pablo Mederos cirujano y Nilo Ortopedico, Barbara baja a los dias con un fallecido, victima de una onda expansiva y pablo le siguió con una linfangitis tremenda, q le discapacitó el miembro al bajar a un refugio, muy valiente barbara, en esos dias aun no había llegado la brigada, Barbara se une en Bié a Adelaida, donde en esta unidad fue la primera en llegar, con 24 anos , la papoyaron en todo, pero creian los miliatres q no se adaptaría, al los 13 meses de estar en Bie salen en caravana, caravana q duró 13 dias en llegar con muchos fallecidos y herdios a Menongue, Adelaida y Barbara compartieron con medicos, y sanitarios esa caravana, despliegue estrategico al sur a finales de noviembre y despues baja en enero Barbara a Cuito, en enero baja la caravana, al frente de la misma el coronel Venacio Avila, alla ya se encontraba un grupo de cubanos apoyando a la fapla q estaba bajo hostigamiento constante desde octubre, vlaiente ese ejercito fapla, al q acompanamos y se mantuvo en primera linea todo el tiempo , ahi se encontraba en entonces coronel Alvaro Lopez Miera, despues se replego en un amplio perimetro la unidad, y como tactica, las unidades se separan en ese perimetro por si ocurria ataque terrestre o aereo, en febreo bajan juntas en helicoptero Odalis, Celia, Juana, Maria, y dias posterioes , quizas 4 baja Adelaida, como tactica el hospital estaba en el puesto de mando de avanzda, ambien habia un alto oficial ahi y un puesto medico en la jefatura de la brigada y asi existia atencion medica a toda la tropa y estrategicamente no estaban juntos, el video q se ve, es cuando se traian enfermos de malaria o cuadros respiarotios o digestivos, generales o accidentados q se atendian en el puesto medico, solamente se atendieron heridos en el mismo el 10 abril, q cae cerca de 100 metros del puesto medico un proyectil de largo alcance de los sudafricanos y lamentablemente muere instantaneamente un joven zpador y hieren a otros, en esa ambulancia venia un enfermo de alguna de nuestras unidaes replegadas en el area, no heirido.
Muy valientes nuestros jovenes soldados, una juventud veinteanera en su mayoria, muy vlaientes nuestros oficliales, la artilleria, la infanteria, los aviones de combate y los utilisimos helicopteros, los correponsales q guardaron la memoria historica de esa guerra y q estaban bajo hostigamiento artillero enemigo filmado junto a la tropa.
valientes todos, mucha unidad, familiaridad, heroicidad, y el sitema de salud pso su granito de arena en toda la contienda.con los imprscindeibles sanitarios
en Angola los medicos civiles, los civiles de las FAR, los de las FAR propiamente dicho, los maestros, los constructores de la uneca, los civiles de otros ministerios, los corrsponsales, todos tienen una anecdota o un acto heroico, todos y los q no lo lograron q regresaron martires a la patria