El escritor norteamericano Ernest Hemingway, una presencia casi corpórea en Cuba, engrosó esta semana la galería de personajes del Museo de Cera de la oriental ciudad de Bayamo, donde aparece sentado en un sillón, con un cigarrillo en la mano. Allí hace compañía a figuras entrañables del acervo e imaginario cubanos, como los músicos Benny Moré, Sindo Garay y Compay Segundo.
La Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD, por su sigla en inglés) aplaudió los llamados del Fondo Monetario Internacional a un esfuerzo internacional de financiamiento que siga los lineamientos del plan Marshall, que ayudó a reconstruir Europa después de la Segunda Guerra Mundial.
En nombre de la Unión de Naciones Sudamericanas, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, condenó en Puerto Príncipe el imperialismo de algunos países donantes. Por su parte, el gobierno haitiano empezó a emitir mensajes por radio en los que pide a la población evitar la reconstrucción de sus casas hasta que haya un plan urbano y reglas estrictas sobre edificaciones.
“El Occidente civilizado y cristiano” durante siglos saqueó a Haití y luego trató a ese país como si fuera “un negro inerte expuesto en una vitrina”, señaló Betto. ”Haití fue invadido por Francia en 1869, por España en 1871, por Inglaterra en 1877, por Estados Unidos en 1914 y en 1915, permaneciendo hasta 1934. Estados Unidos invadió otra vez en 1969″, recordó Betto.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, abogó hoy por “reinventar el mundo y las instituciones” porque está convencido de que “otro mundo es posible”. Así lo transmitió en un discurso leído en su nombre por el canciller brasileño, Celso Amorim, en el Foro Económico de Davos, que le galardonó con el Premio al Estadista Global, el primero en su categoría.
La FAO pidió a los donantes internacionales que apoyen un plan de inversión de 700 millones de dólares en el sector agrícola de Haití, anunció el viernes la organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación. El plan fue elaborado por el gobierno haitiano para reparar las infraestructuras dañadas por el terremoto, impulsar la producción alimentaria nacional y crear empleos para la población que huye de Puerto Príncipe.