Vilma: la confianza inamovible en la fuerza de la mujer

Siempre que se piensa en ella llega a la mente como un soplo de aire fresco. Siempre sonriente y desbordante de empatía, de calor humano, de optimismo y energía. Son cualidades imprescindibles del liderazgo, y Vilma, la nuestra, las tuvo todas y más, porque a esas sumó la humildad, la inteligencia del hacer en función de lo que se sabe justo.