El II Encuentro Latinoamericano Progresista (ELAP), que se desarrolla en Quito, Ecuador, con la participación de 60 organizaciones de izquierda de 30 países, culminará este miércoles con la declaración final, una conferencia del presidente ecuatoriano Rafael Correa y la participación especial del fundador de Wikileaks, Julian Assange.
“La derecha se acostumbró a tener un discurso único durante muchos años. La recomposición de los poderes en América Latina los tensiona. Y aunque todavía hoy tienen el poder en la relación mensaje-receptor, tienen miedo a perder ese privilegio”, precisó Juan Carlos Camaño, presidente de la Federación Latinoamericana de Periodistas (FELAP), durante la emisión de este lunes de la Mesa Redonda, que se dedicó al análisis de la batalla mediática en Latinoamérica, y a la Copa América de fútbol.
Sí, lo seguirán intentando. La oligarquía venezolana no aceptará nunca una Revolución que puso en el centro de su vida, sin distinción de bolsillos, al ser humano. Tampoco la derecha internacional va a soltar prendas en la puja de poderes, porque las hegemonías han encontrado un punto de giro con el liderazgo de la izquierda progresista en América Latina, y unos y otros bien lo saben: la patria de Chávez es epicentro en esas sinergias.
La posición de la región en la Cumbre de las Américas recién concluida, la no adopción de un documento final, el rechazo a las amenazas contra Venezuela y otros detalles de interés serán analizados este martes en la Mesa Redonda, con la participación de altos funcionarios de la Cancillería cubana, el embajador venezolano en Cuba Alí Rodríguez Araque, el filósofo y comunicador venezolano Miguel Pérez Pirela, y periodistas cubanos que dieron cobertura al evento.
Fidel está dispuesto a actualizar la entrevista que concedió hace más de 30 años a Frei Betto y que originó el libro Fidel y la religión, informó en la Mesa Redonda el autor de la obra.
La acción ejecutiva que califica a Venezuela como una amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos, en un año en que se realizarán elecciones legislativas en la Patria de Chávez, refirma el carácter injerencista de la política exterior estadounidense, y ha puesto en alerta a los Gobiernos de América Latina y el Caribe que en enero de 2014, en la II Cumbre de la Celac celebrada en La Habana, declararon a la región como Zona de paz, y repudiaron cualquier acto que atente contra ellos.