La estrella del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) se venía apagando en los últimos años por su tolerancia primero y activa promoción y concuspicencia más tarde, con los banqueros y capos industriales causantes de la crisis económica mundial. España, como Portugal, Irlanda, Grecia e Italia, disputaban el podio de ese horrible torneo, que premiaba a los gobiernos que más daño habían inflingido a sus gentes.
El derechista Partido Popular (PP) con Mariano Rajoy, como presidente, acaba de ganar las elecciones en España. Sin un programa político y sin conocerse quiénes formarán parte del nuevo gabinete, Rajoy obtuvo una abrumadora victoria, frente al Partido Socialista Español (PSOE), el cual perdió más de 4 millones de votos. El PSOE ha sido así, despojado de su liderazgo de 21 de los 30 años de la democracia, como afirmó a la Mesa Redonda Informativa de este martes el analista de temas internacionales, Nelson Roque.
“Más que una victoria del PP fue una debacle del PSOE, porque cuando se ven las cifras se observa que solamente el PP obtuvo medio millón de votos más que en las elecciones de 2008, pero gracias al sistema bipartidista logró una cantidad de escaños bastante amplia que superó al PSOE”.
El Partido Popular- la tradicional derecha española- derrotó por todo lo alto al Partido Socialista Obrero Español en las elecciones generales celebradas ayer domingo en España. La victoria del líder del PP Mariano Rajoy fue abrumadora y le concede una mayoría absoluta en el Parlamento de ese país europeo que le permitirá llevar a cabo sus planes de gobierno con toda autoridad sin que sea necesario el apoyo de otras fuerzas políticas en la Cámara de Diputados de España.
Los españoles dieron el domingo una aplastante victoria al centroderechista Partido Popular y a su líder Mariano Rajoy para gobernar el país durante los próximos cuatro años y gestionar la peor crisis económica y de empleo de su historia reciente. “No va a haber milagros, no los hemos prometido. Para nadie es un secreto que vamos a gobernar en la más delicada coyuntura en que se haya encontrado España en los últimos 30 años”, dijo Rajoy en su primera valoración.
Transcurridas las primeras cinco horas, la participación en las elecciones generales que celebran hoy en España alcanzaba el 37,87 por ciento del electorado, porcentaje inferior al registrado en los comicios anteriores. Según los primeros datos oficiales, ofrecidos por el Ministerio del Interior, la asistencia a los colegios es 2,59 puntos menos a la certificada en 2008, cuando el 40,46 por ciento de los votantes habilitados ejerció su derecho al voto en el mismo lapso de tiempo.
Cuatro desafíos económicos esperan al gobierno español que salga de las elecciones legislativas de este domingo. DESEMPLEO: El estallido de la burbuja inmobiliaria en 2008 destruyó millones de puestos de trabajo y desde entonces el desempleo no dejó de aumentar casi sin interrupción, alcanzand en el tercer trimestre de 2011 un 21,52%, su nivel más alto leados.