En la antesala de una conferencia internacional clave para la reconstrucción de Haití, Naciones Unidas elevó este lunes a 11 mil 500 millones de dólares el cálculo de las necesidades de ese país en los próximos 10 años. El estimado fue dado a conocer por el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, en un artículo publicado este lunes por el diario estadounidense The Washington Post.
El actor Danny Glover comparó el viernes la devastación provocada en Haití por el terremoto del 12 de enero con la destrucción de la Segunda Guerra Mundial, pero dijo que el mundo “está prestando atención” y está listo para ayudar. La estrella de “Lethal Weapon” y ex embajador de Buena Voluntad de Naciones Unidas habló durante una visita a la nación caribeña, donde vio los campamentos donde se alojan algunos de los cientos de sobrevivientes al sismo de magnitud 7,0 que se quedaron sin hogar.
La República de Namibia ofreció hoy, en esta capital, ayuda humanitaria al pueblo de Haití con la entrega de un millón de dólares que llegarán mediante la brigada médica cubana. Claudia Grace Uushona, embajadora de esa nación africana en la isla caribeña, destacó la importancia de contribuir a la recuperación del pueblo haitiano a través de Cuba, que ha sido un ejemplo de solidaridad a nivel internacional.
Un sismo de magnitud 6,2 estremeció al mediodía del viernes una zona del norte del país, sin causar víctimas ni daños, según informes preliminares. El servicio geológico de Estados Unidos informó que el sismo se registró a las 11:52 (14:52 GMT) con epicentro a 76 kilómetros al sur de Copiapó, capital de la región de Atacama, a 820 kilómetros al norte de Santiago.
Casi un millón de personas están alojadas en campamentos o han recibido materiales para construir refugios, tras el devastador terremoto que azotó a Haití el pasado 12 de enero. Así lo informó este miércoles la Cruz Roja Internacional.
La noticia corrió como pólvora: «¡Raúl está en casa de Isora!», y en pocos minutos los vecinos comenzaron a agruparse frente al número 68 de la calle Marina, una estrecha vía del poblado de Caimanera que casi toca el agua de la bahía guantanamera. En la modesta vivienda del matrimonio formado por Isora Mastrapa y Osmel Alfonso, desde que ocurrió el sismo el pasado sábado, a los 12 ocupantes habituales se agregaron otros cuatro, entre hijos, nietos y biznietos, pues quisieron estar unidos tras el gran susto provocado por un lamentable accidente.