El Ejército sirio reportó el lunes que logró al menos 50 bajas en las filas de grupos terroristas que operan en el país, como parte de la ofensiva militar que emprende contra grupos extremistas con apoyo de Rusia. Informaciones reseñadas por la agencia de noticias Sana detallan que más de 20 terroristas murieron en la ciudad de Deir Azzor, al noreste del país, donde además fueron destruidas las armas que estaban pajo su posesión.

Hay que entender que hoy no estamos ante una batalla por la democracia en Siria, sino ante un conflicto armado que nos presenta una crisis sistémica con dimensiones imprevisibles. A Rusia le preocupa esta situación, y así lo acaba de reconocer su presidente Vladímir Putin, quien también alertó que Moscú no es el responsable de las expansiones del terrorismo y sus fuerzas aunadas en el denominado Estado Islámico.

Los conflictos en Palestina, Siria, Ye­men, Iraq, Libia y otros que dominan las noticias del Orien­­te Medio se­rán analizados este miér­coles en la Mesa Redonda por reconocidos especialistas y periodistas. Cubavisión, Cubavisión Inter­na­cio­nal, y Radio Habana Cuba transmitirán este programa desde las 7 de la no­che y el Canal Educativo lo re­trans­mitirá al final de su emisión del día.

Estados Unidos ha retirado oficialmente a Cuba de la lista de países que patrocinan el terrorismo, informa el Departamento de Estado.

La narrativa de los medios sobre el Estado Islámico ignora ante todo las razones subyacentes en la existencia de esos grupos, cuando no son pocos los que sospechan que este movimiento extremista está ajeno al contexto político más amplio del Oriente Medio, ya que parece ser un retoño execrable resultado de las aventuras neocoloniales de Occidente en la región.

Ha pasado una semana de los atentados contra la revista satírica francesa Charlie Hebdo, a los cuales el mundo no ha podido quedar indiferente, no solo por su brutalidad y consecuencias, sino por las múltiples lecturas que genera un hecho como este. En Francia miles de manifestantes reclaman el derecho a la libertad de expresión, mientras las comunidades musulmanas invocan a la tolerancia y a establecer las diferencias entre el islamismo y el islam. En paralelo, las grandes potencias Occidentales, por su parte, expresan su solidaridad al país galo con un llamado a relanzar el enfrentamiento al terrorismo.