Capítulo final de La Historia no contada de los Estados Unidos

Durante los 15 minutos previos de presentación, el periodista y moderador Reinaldo Taladrid precisó que en este capítulo se observa la gestación de la era del terrorismo que hoy se está viviendo.

Fotos: Roberto Garaicoa

Por Yailin Orta Rivera, especial para la Mesa Redonda

El 11 de septiembre dio la oportunidad a George W. Bush de llevar a cabo los planes de sus asesores más ultraderechistas. Se instaló la paranoia tanto en el exterior como en el interior con medidas que desafiaban al Estado de Derecho. Muchas cosas no pudieron cambiar con Obama. Así refleja Oliver Stone los años más recientes de la nación estadounidense en el capítulo final de su serie La Historia no contada de los Estados Unidos, que la Mesa Redonda transmitió este miércoles.

Durante los 15 minutos previos de presentación, el periodista y moderador Reinaldo Taladrid precisó que en este capítulo se observa la gestación de la era del terrorismo que hoy se está viviendo y adelantó que en 2008, cuando Oliver Stone se propuso hacer esta serie, tenía 17 películas en su haber.

Stone describió en una entrevista qué lo animó a producir y realizar La Historia no contada de los Estados Unidos: “(…) Me cuestionaba qué había sido de mí en los ocho años que llevábamos con George W. Bush en la Casa Blanca, los cuales eran una pesadilla, una verdadera pesadilla para quien como yo llevaba la carga de ser veterano de Vietnam, y me repetía todos los días en qué nos habíamos equivocado, qué no habíamos sabido ver. Y pensé que tendríamos que hacer algo más por nuestros hijos.

No hice el filme pensando en el éxito, tampoco para mi satisfacción personal. Traté de hallar respuestas acerca de por qué en mis años de vida, desde 1946 hasta acá, este país que amo, que siempre vimos como un gran país, se había convertido en un monstruo, en un vampiro a los ojos del mundo”, confesó el autor de Pelotón.

En cuanto a su elección por el género documental, en otra oportunidad expresó: “Los documentales nos refrescan. Vas a las fuentes, haces trabajo de campo, te exige investigar. Recibes una transfusión, porque es algo diferente a la vida en el estudio de filmar, donde prevalece la manufactura y terminas por hacer cosas que solo cobran sentido en la medida que seas capaz de conquistar con esa manufactura a las audiencias. No es que eso esté mal, pero no es suficiente ni llegas a cuestionarte las verdades básicas de la vida”.

Para el crítico Pedro de la Hoz, el norteamericano Oliver Stone ha puesto por delante su prestigio como realizador de exitosas producciones para desarrollar una carrera de documentalista que en los últimos años ha alcanzado una enorme repercusión.

En su opinión, en La Historia no contada…, estructurada en diez capítulos de una hora de duración, Stone recorre con mirada penetrante los avatares de la política exterior de EE.UU. desde la Segunda Guerra Mundial hasta las intervenciones en Afganistán e Iraq bajo el pretexto de la lucha global contra el terrorismo.

Precisó que aunque el estreno de la serie por la televisión tuvo lugar en noviembre de 2012 en Showtime, hubo proyecciones previas de los primeros capítulos en festivales de cine independiente en EE.UU., y en otros certámenes en los que encontró gran audiencia y felices comentarios, aunque en su país fue atacada por algunos conservadores que consideraron que Stone le facilitaba el camino a los enemigos. El Hudson Institute, que cobija a tanques pensantes vinculados al Tea Party, luego de hacer todo lo posible para que ninguna televisora programara la serie, acusó al director de reciclar el pensamiento stalinista.

En el 35 Festival Internacional de Cine de La Habana igualmente se proyectó esta serie que pone boca arriba la historia de EE.UU. y la sacude del triunfalismo enajenante que acompaña al sueño americano.

Este tipo de material, dijo De la Hoz, se complementa con un libro de más de 700 páginas que la editorial Simon & Schuster publicó con el título de La historia secreta de Estados Unidos, nombre que también llevaría la serie, pero el historiador Peter J. Kuznick convenció a Oliver Stone de que lo apropiado era definir que se trataba de “una historia no contada”.

De la Hoz puntualizó que abundantes imágenes de archivo, procedentes de noticieros y documentales, fragmentos de películas de ficción, mapas y otros elementos infográficos confluyen en un hilo dramático que aborda sucesivamente el desenlace de la Segunda Guerra Mundial (cap. 1); las actuaciones de Franklin D. Roosevelt, Harry S. Truman y Henry Wallace (cap. 2); el inicio del terror atómico (cap. 3); el comienzo de la Guerra Fría (cap. 4); los años 50 con Eisenhower y las políticas hacia el Tercer Mundo (cap. 5); la ascensión y caída de Kennedy (cap. 6); Johnson, Nixon y la agresión a Vietnam (cap. 7); Reagan, Gorbachov, la geopolítica y la entronización de la más rancia derecha (cap. 8); Bush padre, Clinton, el triunfalismo y el nuevo orden mundial (cap. 9) y Bush hijo, Obama y la era del terror (cap. 10).

El destacado periodista advirtió que el autor de Salvador añadió luego dos episodios a la serie, que en su criterio posee una poderosa narración y desmitifica la historia contada por el poder.

Materiales como este permiten una visión poliedra de la realidad, y que el espectador asuma una postura crítica frente al consumo. Acá no estaremos ante un historiador, sino frente a un hombre que ama a su país y siente que lo ha defraudado, y busca los elementos para releer su tiempo. La Historia no contada…, además, nos demuestra que la historia no es en blanco y negro, ni maniquea.

Para el crítico Pedro de la Hoz, el norteamericano Oliver Stone ha puesto por delante su prestigio como realizador de exitosas producciones para desarrollar una carrera de documentalista que en los últimos años ha alcanzado una enorme repercusión.

En su opinión, en La Historia no contada…, estructurada en diez capítulos de una hora de duración, Stone recorre con mirada penetrante los avatares de la política exterior de EE.UU. desde la Segunda Guerra Mundial hasta las intervenciones en Afganistán e Iraq bajo el pretexto de la lucha global contra el terrorismo.

En el 35 Festival Internacional de Cine de La Habana igualmente se proyectó esta serie que pone boca arriba la historia de EE.UU. y la sacude del triunfalismo enajenante que acompaña al sueño americano.

Este tipo de material, dijo De la Hoz, se complementa con un libro de más de 700 páginas que la editorial Simon & Schuster publicó con el título de La historia secreta de Estados Unidos.

1 Comentario »

  • Adolfo dijo:

    No pude ver todos los documentales, pero las que vi me gustaron mucho, amén de que no coincido con algunas apreciaciones como el tratamiento a Gorbachov, pero la pregunta es ¿cómo se pueden obtenerlos para consultarlos de cuando en cuando en la casa? No está en el paquete.

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