Ucrania, un año después

La Mesa Redonda Comenzando la semana dedicó su emisión al análisis de la compleja situación en Ucrania y a la batalla de Argentina por su soberanía, frente al sistema financiero internacional, con una entrevista exclusiva a Pedro Biscay, director del Banco Central de ese país.

Por Yailin Orta Rivera, especial para la Mesa Redonda

Fotos Roberto Garaicoa

Ucrania, un año después de que comenzaran los sucesos desestabilizadores antirusos, sigue sumida en una profunda guerra civil, el mismo conflicto que ha provocado más de 5 500 muertes y ha generado más de un millón de desplazados en ese país.

El máster Santiago Pérez explicó en la Mesa Redonda de este lunes que en cada suceso político siempre influyen muchas causas, y que la crisis que comenzó en noviembre de 2013 y terminó en febrero con la deposición del presidente Yanukóvich, también tuvo entre sus condicionantes el guion preestablecido por Estados Unidos y Europa. “Comenzaron con una línea de subversión al interior y una de segregación a Rusia”.

Después de un año, dijo, existe una mayor polarización. “En el Este está dividida por la guerra, y en el Oeste y el Centro se mantiene un sentimiento antiruso, y se ha impuesto con mucha fuerza el neofascismo en las estructuras de poder que procuran la supresión de la oposición. Y el poder de los oligarcas se mantiene igual, de hecho, un oligarca está de presidente”.

Al interior de las élites políticas también existe división. “Es un sistema político muy cambiante. Poroshenko representa algunos intereses de la élite y hay un sector extremista que ha generado este nivel de coerción, porque hay bloques que comulgan con estas situaciones”.

En opinión del experto, un año después, Ucrania es más dependiente del exterior. “El poder del FMI y de la Unión Europea es muy grande. Tienen tarifas que pagar muy fuertes. La revuelta para una mayor independencia de Rusia no ha tenido lugar, lo que han provocado es sumir a Ucrania en una seria crisis internacional y una inestabilidad mundial. La situación es muy crítica desde el punto de vista interno”.

Ante la interrogante de si se está tratando de empujar a Europa a una guerra contra Rusia, empleando como señuelo a Ucrania, el analista consideró que de los méritos que se le han adjudicado a Obama, está haber logrado llevar las riendas de Europa en una unión estratégica.

“Juntos, como miembros de la OTAN, abogaron por una mayor vinculación de Ucrania. Da la impresión a veces de que Europa estaría haciendo del policía bueno y Estados Unidos del policía malo. Los norteamericanos estaban diciendo que darían un apoyo militar de 3 mil millones de dólares, pero ante un posible desbordamiento de la guerra, los europeos apuraron el acuerdo de Minsk, que al final ha resultado muy frágil, y fue el resultado de 16 horas de negociación”.

Añadió que Estados Unidos, del otro lado del Atlántico, está mirando cómo evolucionan los acontecimientos. Pero al final lo que ambos están buscando, tanto Estados Unidos como Europa, es el debilitamiento de Rusia, de las milicias… y obtener mediante la negociación más de lo que el ejército ucraniano ha obtenido.

Sobre las perspectivas de los acontecimientos, Santiago Pérez no se arriesgó a dar un juicio conclusivo. “Puede pasar cualquier cosa, aunque no creo que se llegue al nivel de una III Guerra Mundial. Hay un peligro de escalada, pero no creo que debamos quitarle la borda al acuerdo de Minsk. Lo que sí hay son posibilidades de que el conflicto se mantenga”.

LA ESPECULACIÓN FINANCIERA Y AMÉRICA LATINA

El segundo tiempo de la Mesa Redonda tuvo como invitado especial al Director del Banco Central de Argentina, quien se detuvo en el análisis de la especulación financiera, una actividad propia que realizan los actores financieros para buscar rentas. “Es el motor que genera acciones orientadas a producir rendimientos en contra de la posibilidad de regulación de los Estados”, aseguró.

En su opinión, hay un conjunto de actores que generan una gran presión y reproducen esquemas desiguales. “El sistema financiero a nivel internacional responde a intereses y uno percibe que las reglas de distribución marcan puntos de modificación”.

Hoy, precisó, en el mundo existen unos países que forman parte del grupo de los Brics que están marcando un nuevo eje geopolítico en cuanto a cómo establecer vínculos comerciales, y en torno a cómo volver a pensar los vínculos institucionales y políticos con el sistema financiero.

Frente a la especulación financiera, la cual consideró el corazón del capitalismo, existen importantes desafíos, entre los cuales citó: generar mecanismos de regulación desde el Estado para garantizar la distribución de bienes y servicios. “Porque los mercados se autorregulan en perjuicio de la gente si el Estado no interviene”.

Alegó que la especulación financiera y el mercado tienen una relación de poder muy potente, por lo que está en juego quién define el sentido de las soberanías política o jurídica en estos mercados: los gobiernos o esos actores económicos.

Sobre lo que ocurre en América Latina, añadió que se procura establecer mecanismos internacionales de intercambio de información para reducir la opacidad financiera de estructuras de negocios, que buscan permitir que el Estado conozca cómo se invierte en sus territorios y se conozcan cuáles son las reglas del juego.

En la República de Argentina, dijo, ha tenido saldos muy positivos la intervención del Estado, porque se han reducido los niveles de desempleo y se han aumentado las condiciones de igualdad. “No obstante, en nuestra región hace falta mucho por hacer porque son países que están atravesados por historias de mucha complejidad. En nuestro país tuvimos momentos muy duros y hubo que acudir a las calles para buscar la reivindicación del derecho en todas las posibilidades de organización. Por ello es tan necesario desarrollar un pensamiento crítico, para que los Estados asuman la defensa de los derechos fundamentales”.

En el caso de América, sostuvo, para contrarrestar los ataques especulativos se puede acudir a un esquema coordinado de acumulación de reservas. “Además, la principal herramienta que tienen nuestros países consiste en generar políticas muy activas, tendientes a crear reservas para resistir golpes de mercados. Las estructuras conocidas y desarrolladas no han permitido crear buenos dispositivos jurídicos para contrarrestar situaciones fácticas que desde las finanzas generan efectos dañinos para las comunidades de nuestros países”.

El Director del Banco Central de Argentina aludió a que es importante trabajar fuertemente con inversiones para crear mayores conocimientos, de lo que depende la expansión de aparatos productivos sólidos y el desarrollo.

El máster Santiago Pérez explicó en la Mesa Redonda de este lunes que en cada suceso político siempre influyen muchas causas, y que la crisis que comenzó en noviembre de 2013 y terminó en febrero con la deposición del presidente Yanukóvich.

Ante la interrogante de si se está tratando de empujar a Europa a una guerra contra Rusia, empleando como señuelo a Ucrania, el analista consideró que de los méritos que se le han adjudicado a Obama, está haber logrado llevar las riendas de Europa en una unión estratégica.

Añadió que Estados Unidos, del otro lado del Atlántico, está mirando cómo evolucionan los acontecimientos.

El segundo tiempo de la Mesa Redonda tuvo como invitado especial al Director del Banco Central de Argentina, quien se detuvo en el análisis de la especulación financiera, una actividad propia que realizan los actores financieros para buscar rentas.

1 Comentario »

  • qbano dijo:

    y la mesa sobre el golpe en Vzla, la posturas de Colombia, los intentos en Argentina, los debates en Brasil donde esta, que paso? ahora somos más europeos que americanos? o es que el discurso moderado incluye que no podemos denunciar las artimañas y abusos del imperio?

Haga un comentario.

Deje su comentario. Usted también puede subscribirse a estos comentarios vía RSS.