Cincuenta años cumple este 1ro. de diciembre el Instituto de Medicina del Deporte y a sus primeros quince años arribó en este 2016 el Laboratorio Antidoping, sobre estos importantes centros trató la Mesa Redonda de este miércoles.

Por Yailin Orta Rivera, especial para la Mesa Redonda

Fotos: Roberto Garaicoa

Cincuenta años cumple este 1ro. de diciembre el Instituto de Medicina del Deporte y a sus primeros quince años arribó en este 2016 el Laboratorio Antidoping, dos centros que sedimentan el sistema de atención a los atletas y ratifican la importancia que en esta Isla se le ha dado al movimiento de alto rendimiento y a la educación física de los cubanos.

El Doctor Jorge Pavel Pino, director del Instituto de Medicina Deportiva, hizo referencia en la Mesa Redonda de este miércoles a la historia de ese sistema de atención que tuvo su génesis en el departamento médico que se creó en 1960, cuando surgió el Inder.

Sin embargo, esa proyección asistencial se decidió superar en 1966, cuando con otros 9 institutos que existían se estructuró el Instituto de Medicina del Deporte, que no se quedó en la labor de diagnóstico, sino que amplió su trabajo, de conjunto con los entrenadores, a evaluar los procesos de cargas de entrenamiento deportivo, lo que está regido por el desarrollo de las capacidades en los atletas. “Esto implica que se hagan exámenes que les ofrecen una información precisa a los entrenadores de la situación biológica y psicológica de los competidores”, comentó.

En su intervención ponderó como otro hito importante en el desarrollo de este sistema médico deportivo la creación, en 1960, del claustro de Medicina del Deporte, que es una especialidad médica, en la que se han formado un grupo valioso de especialistas.

En 1982, argumentó, cuando se empiezan a formar las escuelas de iniciación deportiva, se amplió esta atención con 16 centros de Medicina del Deporte, y en 2001 se creó el Laboratorio Antidoping.

Entre las características fundamentales del trabajo que desempeñan, refirió que están  vinculados a los colectivos de entrenadores para evaluar los procesos de entrenamiento deportivo, y para ello se cuenta con un destacado capital humano de unos 1 740 profesionales que se han graduado en especialidades de la Medicina Deportiva.

Acentuó que desde 1978, el Instituto de Medicina del Deporte se distingue por ser además un centro de investigación, y la Academia de Ciencias de Cuba le dio la condición recientemente de Centro de Investigación Científica.

La Doctora Evelina Almenares precisó que cuentan con un Consejo Científico que se dedica al asesoramiento y control de esta actividad. “La estructura está constituida por 20 miembros, a los que se unen asesores e invitados”.

De los miembros del Consejo, destacó que 11 son Doctores en Ciencias y 6 Másteres. “Por lo que el 80 por ciento tiene un alto nivel científico. También contamos con comités de expertos y comisiones para la atención de los aspectos más importantes para el incremento de los investigadores categorizados y para los planes de formación de los Doctores en Ciencias dentro de la institución, porque hay que tener excelencia, aunque tengamos la maestría acreditada”.

Aseguró que han hecho una reestructuración de las comisiones internas que trabajan en el Consejo Científico y que están fortaleciendo los controles y el trabajo en los aspectos fundamentales, como la elevación del nivel de la revista de Medicina del Deporte.

Entre las temáticas que investigan, mencionó la traumatología del deporte y la actividad física, entre otras vertientes. “Igualmente existen líneas como la psicología del deporte, el doping y el trabajo de educación y prevención en este sentido. Al mismo tiempo, existe una tendencia más reciente a fortalecer el trabajo docente por medio de la investigación, y se creó una comisión de trabajo docente”.

El Doctor Gustavo González se detuvo en que en el mundo contemporáneo no se puede pensar en el deporte sin entender variables psicológicas que influyen en los rendimientos de los atletas, por ello en el equipo multidisciplinario que atiende a los competidores no pueden faltar estos especialistas.

“El sentido es contribuir a la excelencia deportiva, en lo que también los psicólogos ofrecen asesoramiento a los entrenadores. Nosotros contamos específicamente con 46 profesionales de esta especialidad dedicados a ello”.

En el desempeño de este trabajo, refirió que se ha seguido el modelo soviético, que concibe el seguimiento del psicólogo en el área de formación y entrenamiento, “por eso hacemos psicodiagnósticos e intervenciones psicológicas en el terreno”.

Gustavo González subrayó que una de las dimensiones que más los ocupa es la moral de equipo. “El psicólogo tiene herramientas para diagnosticar cuál de los aspectos asociados a este comportamiento colectivo está fallando y darle recomendaciones a los entrenadores.

“También tratamos de que en promoción de salud la experiencia que hemos acumulado nos pueda servir en un futuro no muy lejano, para atender al hombre y a la mujer común que quiera alcanzar la excelencia para la salud”.

Se detuvo en que esta especialidad se integró hace 42 años al desempeño del Instituto y que ya fue superado el comportamiento que se evidenció en los años 70 y 80, cuando los médicos no se vinculaban a los psicólogos.

15 AÑOS DEL LABORATORIO ANTIDOPING

Solo 28 laboratorios antidoping existen en el mundo y seis de ellos en América, uno de ellos es el cubano, que surgió por inspiración de Fidel, cuando en los juegos de Winnipeg se pretendió restar prestigio a alguno de los atletas nuestros.

Rodny Montes de Oca, director de esta institución, resaltó que pocos países pueden darse el lujo de tener un laboratorio como este, por lo costoso que es y por los requisitos que implica tenerlo y mantenerlo acreditado, algo que Cuba ha logrado durante estos 13 años.

El Doctor comentó que existen rigurosas exigencias y requerimientos de tipo internacional que hay que cumplir para tener esta condición, entre lo que se incluye haber realizado unas 3 mil muestras al año, “en el presente, acotó, hemos hecho más de 2 000, y de ellas, entre 4 y 5 a los atletas que se presentarán a la cita olímpica de Río de Janeiro como parte de nuestra delegación”.

Además de hacer referencia a los altos estándares que cumple esta institución, el directivo comentó que contar con ella tiene entre sus impactos saber que se cuenta con una población atlética libre de dopaje, en momentos en los que son más frecuentes los récords de dopaje en las lides internacionales.

A esta labor de control, dijo, se suman programas eficaces educativos, para que los atletas conozcan las complejidades de esta problemática. “Esto no quiere decir que haya casos aislados y muy puntuales de dopados, pero viendo que hay delegaciones que son vetadas para asistir a competencias, podemos sentirnos muy orgullosos de que en nuestro país se asuma una política serie y rigurosa en este tema”.

Como mayor fortaleza de este centro, ponderó a los recursos humanos, de los cuales muchos de ellos se forman en el exterior.

Apuntó que el tema del dopaje es complicado, porque ocurren accidentes cuando un atleta consume un medicamento no prescrito por su especialista o come fuera de la villa y se contamina con un alimento. “Ellos deben comer lo certificado y no pueden tomar el agua que no sea certificada, porque se han dado casos de atletas que dopan a otros para ganarle. Por eso a los nuestros les hablamos de la importancia de mantener una conducta estricta para evitar una situación de esta naturaleza”.

El Doctor Pavel Pino añadió que en la villa olímpica de Río de Janeiro el restaurant estará abierto todo el día, por lo que no tendrán necesidad de ir a otros lugares a alimentarse. También aseguró que ya se les han puesto todas las vacunas a los miembros de la delegación cubana e irán con repelente para protegerse de las picaduras de mosquito.

Entre los esfuerzos que está haciendo el Instituto de Medicina del Deporte, refirió que para disminuir los gastos -10 mil dólares al año- en concepto de suplementos nutricionales, de conjunto con Coracán han creado la bebida Ergo plus, la cual será la primera producción de su tipo en el país.

El Doctor Jorge Pavel Pino, director del Instituto de Medicina Deportiva, hizo referencia en la Mesa Redonda de este miércoles a la historia de ese sistema de atención que tuvo su génesis en el departamento médico que se creó en 1960, cuando surgió el Inder.

En su intervención ponderó como otro hito importante en el desarrollo de este sistema médico deportivo la creación, en 1960, del claustro de Medicina del Deporte, que es una especialidad médica, en la que se han formado un grupo valioso de especialistas.

La Doctora Evelina Almenares precisó que cuentan con un Consejo Científico que se dedica al asesoramiento y control de esta actividad.

Rodny Montes de Oca, director de esta institución, resaltó que pocos países pueden darse el lujo de tener un laboratorio como este, por lo costoso que es y por los requisitos que implica tenerlo y mantenerlo acreditado, algo que Cuba ha logrado durante estos 13 años.