El Pentágono aseguró hoy que aviones estadounidenses aún mantienen los bombardeos sobre objetivos en Libia luego del traspaso del mando de las operaciones a la OTAN.

Las declaraciones del portavoz de la secretaría de Defensa, coronel David Lapan, contrastan con afirmaciones de la Casa Blanca sobre las actividades de sus fuerzas en la agresión contra la nacion norafricana.

El gobierno aseguró que tras una fase inicial de ataques contra objetivos libios, la fuerza aérea y las unidades navales estadounidenses jugarían un papel de apoyo a las acciones para derribar el gobierno de Muamar el Gadafi.

Mientras tanto, Francia condicionó hoy un alto al fuego en Libia a la retirada de las fuerzas leales a Trípoli de las ciudades donde fueron derrotados los grupos rebeldes.

Asimismo, el llamado Grupo de Contacto para Libia, reunido este miércoles en Catar solicitó a Gadafi que deje el poder.

Tenemos que emplear todos los medios posibles y, en caso de necesidad, los militares, para llevar la ayuda a las personas que las necesitan, indicaron representantes de naciones y de grupos que se oponen a las actuales autoridades libias.

Si embargo, el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, admitió que el operativo militar no es suficiente para poner fin al conflicto. “No puede haber una solución militar. Necesitamos poner en marcha un proceso político”, dijo.

Agregó que la alianza atlántica dejó fuera de combate una tercera parte del aparato militar de Gadafi en más de 900 ataques aéreos y rechazó las críticas de Francia, que piden una actuación más contundente de la OTAN.

La situación en la nación árabe se mantiene incierta, mientras la Unión Africana (UA) consideró que lograr un alto el fuego entre Gadafi y las fuerzas rebeldes es su objetivo prioritario.

(Con información de Prensa Latina)