Osleni Guerrero obtuvo la medalla de plata en el Badminton, en partido efectuado en la Unidad Deportiva Revolucion, en la ciudad de Guadalajara, Mexico, el 20 de octubre de 2011. AIN FOTO/Juan Pablo CARRERAS

Por: Coto Wong, enviado especial de Prensa Latina

El badmintonista Osleni Guerrero obtuvo hoy para Cuba una medalla de plata inesperada, de esas que nunca aparece en los guarismos y fórmulas de los especialistas.

Sin embargo, se convirtió en el primer jugador de la Isla que conquista en Juegos Panamericanos tan preciado premio.

Esa presea y la del nadador Hanser García en los 100 metros libres, del mismo color, clasifican como las más espectaculares de esa nación en esta cita, al menos hasta el momento.

Asediado por muchos colegas tras la conferencia de prensa en el Gimnasio de Usos Múltiples Revolución, sede de las competencias del badminton, el oriundo de La Habana conversó con Prensa Latina.

Desde Río de Janeiro-2007, cuando caí en los cuartos de finales, estuve pensando en esta posibilidad, la de lograr una medalla aquí en los Juegos de Guadalajara, recordó.

Era importante para mí cumplir conmigo mismo. Me impuse una meta que sabía podía lograr. Solo había que proponérselo y así lo hice, el resultado fue esta medalla de plata con ribetes de oro, comentó.

Sobre el certamen, lo consideró como uno de los más fuertes que haya enfrentado en los últimos tiempos, con excelentes jugadores de una impresionante hoja de méritos como el guatemalteco Kevin Cordon, medallista de oro ahora y subtitular de la cita carioca.

Traje a Guadalajara el propósito de buscar una medalla de bronce, pero a medida que avanzó el torneo las cosas me salieron mucho mejor de lo que pensaba y de momento me vi en la final ante Cordon, rememoró.

La experiencia, la pericia y los años dedicados al bádminton le dieron el triunfo al centroamericano por marcadores de 23-21 y 21-19.

Jugué al máximo de entrega ante un jugador reconocido como uno de los mejores del mundo. No tengo el oro, pero lo importante es saber que se puede conseguir lo que uno se proponga. Realmente estoy muy satisfecho conmigo mismo, finalizó.