Los reyes de España, asistieron hoy a la apertura de la exhibición del más icónico autorretrato del pintor ibérico Francisco de Goya. Foto: ACN.

Los reyes de España, Felipe VI y Letizia, asistieron hoy a la apertura de la exhibición del más icónico autorretrato del pintor ibérico Francisco de Goya (1746-1828), que data del año 1815, en el Edificio de Arte Universal del Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA), como parte del programa de su primera visita oficial a Cuba.

Como los reyes españoles, la obra llegó a La Habana en saludo al aniversario 500 de la fundación de esta urbe, y quedará expuesta a la población en la Sala Temporal del cuarto piso del inmueble durante un mes, a partir de mañana viernes.

El primer Goya en arribar a suelo cubano constituye una de las grandes joyas del afamado Museo Nacional del Prado, de Madrid, el cual lo ha cedido a Bellas Artes a pesar de la política restrictiva en cuanto a préstamos que aplica en este 2019, año de su bicentenario, el cual cumple el 19 de noviembre.

Jorge Fernández, director del MNBA, explicó en declaraciones a la prensa que fue escogido De Goya para la ocasión porque es un artista más cercano a la historia y a la fundación de la academia de arte en Cuba, San Alejandro, que tuvo un punto de mira en su homóloga de San Fernando, donde el artista español desempeñó un rol importantísimo con su obra como artista y profesor.

Como los reyes españoles, la obra llegó a La Habana en saludo al aniversario 500 de la fundación de esta urbe. Foto: ACN.

Fernández comentó que la pieza de 43×35 cm, constituye también el primer préstamo que realiza a una institución cubana el afamado museo madrileño y que se espera esta marque el inicio de futuras colaboraciones.

En las últimas dos décadas el Autorretrato (1815) del genial Francisco José de Goya y Lucientes ha estado en el continente americano en tres oportunidades, la última de las cuales fue en una exposición en Estados Unidos.

Días atrás en una conferencia de prensa, el curador de la muestra, Manuel Crespo, dijo que Goya puede entenderse como el último pintor clásico español y a la vez el primer moderno, y que en este cuadro que se expone hoy en La Habana se pueden apreciar “las cualidades clásicas de su obra, pero también esa fuerza que abre el camino al romanticismo, de una psicología muy fuerte y trazos muy libres”.

( Con información de ACN )