Están tratando de impedir que llegue el combustible a Cuba, chantajean a las empresas y los cargueros que hacen negocios con nuestro país, la aplicación de la Ley Helms-Burton ha intimidado y presionado, y esa situación −explicó Díaz-Canel− ha provocado en los últimos días una baja disponibilidad de diésel para la producción y los servicios, algo que hemos visto en las paradas.

“El asunto es esencialmente energético, con algunos de los combustibles, y por eso vamos a explicar las afectaciones. No es de abastecimiento, tenemos alimentos en los puertos”, enfatizó.

“Este escenario nos obliga a tomar medidas para salir de esta situación coyuntural, minimizar el impacto en los servicios priorizados y optimizar el uso de los combustibles. Estamos en condiciones de sortear bastante bien la situación actual”, dijo.

El Presidente cubano refirió que el país venía trabajando en un grupo de áreas para garantizar el enfrentamiento a situaciones como esta.

“Hay un plan permanente sostenido y genocida de los adversarios, es vulgar y perverso (…), está en los orígenes de las relaciones Cuba-EE.UU. Nosotros también tenemos nuestro plan para enfrentar a los enemigos de la nación cubana. ‘Plan contra plan’, como planteó Martí”.

“El nuestro −continuó− se basa en premisas, principios y conceptos de trabajo. Primero, pensar como país, pensar Cuba y ver cómo todos contribuimos a que las decisiones que tomemos sean las mejores para la nación, por encima de las individuales”.

En primer lugar, el mandatario citó la necesidad de lograr la comprensión y el apoyo del pueblo ante estas medidas, que son necesarias ante la tensa situación existente con algunos tipos de combustibles.

“Trabajar con valentía −que la belleza está en lo retador de las situaciones y en crecernos− (…), con inteligencia, responsabilidad, optimismo y creatividad, sin lamentaciones, seguros de que somos capaces de superar una coyuntura como la que estamos presentando”.

Díaz-Canel demandó pensar y actuar distinto, en el sentido de activar la creatividad y generar respuestas nuevas a problemas “no tan nuevos”, pero que se presentan en un escenario como el que impone la administración de EE.UU.

Ante las dificultades con el transporte, sugirió acudir −en algunas esferas y ámbitos−, al trabajo administrativo a distancia o desde las casas, algo que se puede propiciar como resultado del proceso de informatización.

“Tenemos que tomar experiencias satisfactorias aplicadas en el Periodo especial en cuanto a soluciones para el transporte”.

Entre los ejemplos, citó el desplazamiento de los horarios laborales, así como de los picos de consumo eléctrico para lograr que la demanda se distribuya mejor en el tiempo y aprovechar mejor las capacidades de generación.

Díaz-Canel subrayó el protagonismo de la población en el actual escenario, así como el aporte que pueden brindar los jóvenes. En el caso de dirigentes y cuadros, llamó a desempeñar sus tareas a la altura del momento y actuar con convicción en su rol de servidores públicos, “con estilos de trabajo afines a los momentos actuales”.

“Es básico rechazar en todos los espacios, con energía, la política hostil del imperio, el principal responsable del cerco económico que se ha tendido ante nuestro país. Este llamado hay que entenderlo como una convocatoria a dar lo mejor de nosotros, sin dramatismos ni falsas alarmas”, dijo el presidente cubano durante su intervención en la Mesa Redonda.

“Puedo afirmar, serena y firmemente, que contamos con una estrategia para vencer, y que la administración yanqui no va a lograr sus propósitos de desalentar al pueblo cubano y mucho menos rendirlo.

“Queremos, con toda claridad, enfatizar en la trascendencia del momento, lo que nos exige fortalecer el sentido patriótico y de unidad nacional, y el espíritu de resistencia y de victoria que siempre nos ha caracterizado”.

Hoy es importante −aseveró− compartir entre todos el fomento del ahorro como una práctica de vida, y el altruismo como una actitud; enfrentar con rigor y firmeza las manifestaciones de delitos asociados al desvío del combustible, y a la posible actitud oportunista con que se puedan comportar determinadas personas, subiendo precios, acaparando productos o especulando.

En ese sentido, llamó a la vigilancia y actuación popular, como la efectuada recientemente a raíz del incremento salarial en el sector estatal.

Díaz-Canel dijo que el Gobierno comprende que puede existir la preocupación sobre una vuelta a un Periodo especial, pero aseguró que no existe tal posibilidad porque contamos con fortalezas que antes no existían.

“En primer lugar, tenemos una estrategia de desarrollo económico y social, una conceptualización del modelo; tenemos las bases para el desarrollo a largo plazo con vistas al 2030 y recientemente aprobamos una nueva constitución, que posibilitó que aprobáramos ya tres leyes, y próximamente tendremos que elegir los tres cargos fundamentales en la máxima dirección del país. Todos estos procesos han contado con el apoyo mayoritario de nuestro pueblo”.

El presidente cubano comentó que situaciones más complejas de carencia nos pueden llevar a que los programas estén más rápido o menos rápido, pero “andarán, sin espacio para la improvisación, sí para la innovación”.

Recordó, además, que en Cuba se produce una cantidad de petróleo que cumple con el 40 por ciento de las necesidades del país. “Con la producción nacional garantizamos que las termoeléctricas puedan trabajar en estas condiciones, solo hay que garantizar el combustible para otras esferas de la economía”.

“Por otra parte, está el desarrollo del país en el turismo, con más de 70 mil habitaciones en todo el país, a pesar del bloqueo. Hay que decir que en medio de toda esta situación, el arribo de los turistas se ha mantenido en buenos niveles, pese a la restricción en los arribos de cruceros. Además, en esta etapa estival creció en gran medida el turismo nacional en un 19 por ciento”.

El presidente de los Consejos de Estado y de Ministros comentó que los inversionistas principales en el país no se han retirado, y se tienen conversaciones y alianzas con otros países y bloques del mundo, como la Unión Europea.

“Un tribunal europeo negó recientemente una demanda amparada en la Ley Helms-Burton, y eso nos da confianza”.

En los últimos meses se realizó la Feria Internacional de Turismo, en La Habana, donde se celebraron reuniones con varios empresarios interesados en invertir en Cuba, además de otros foros de negocios que permiten constantemente firmar acuerdos con inversionistas extranjeros. “Estamos aprobando proyectos de inversión extranjera, por ejemplo, en la producción de carne de cerdo y de pollo”.

Señaló también que se cuenta con la exportación de servicios médicos y hay un incremento en la sustitución de importaciones, así como proyectos para potenciar la producción nacional, además de la existencia de un sector no estatal que crece y constituye un sustento en la economía, el cual también se ve afectado por las medidas del Gobierno de Estados Unidos.

“Tenemos una economía más diversificada e insertada en el mercado internacional, una mayor infraestructura y reservas, relaciones con Venezuela, Rusia y países de África y América. Cuba no está ni remotamente aislada, somos un país que el mundo mira con admiración y respeto”, afirmó.

“Contamos con las experiencias en el enfrentamiento al Periodo especial, que han dado lecciones de resistencia. Se ha demostrado que sí se pudo, sí se puede y sí se podrá”.

Miguel Díaz-Canel informa medidas coyunturales ante situación energética de Cuba en la Mesa Redonda. Foto: Estudios Revolución.

La situación actual no tiene que ver con las insuficiencias nuestras, sino con las medidas extraterritoriales del gobierno de Estados Unidos que afectan a nuestra población y desmienten su hipócrita afirmación de que lo hace por el pueblo, “que es un pueblo alegre y las sabrá enfrentar”, señaló Díaz-Canel en la Mesa Redonda.

En medio de esta situación -recordó- se subió el salario, se mejoró el transporte por ferrocarril con nuevas inversiones, se evitó la subida de precios, se aseguró el inicio del curso escolar, se superó el desabastecimiento y problemas en la generación eléctrica. “Han tenido resultado las medidas que hemos tomado”.

Explicó que “hemos tenido que hacer constantes negociaciones para ver cómo hacemos llegar combustible al país, y las últimas negociaciones no se dieron y no se logran concretar.

“El día 14 entra un barco de combustible. Tras el próximo embarque debemos mantener medidas de ahorro y de uso eficiente para que nos dure, y lograr un nivel de actividad. La buena noticia es que todas las contrataciones para asegurar el mes de octubre están garantizadas. Tendremos que mantener, no obstante, medidas de ahorro en todos los órdenes”.

Consideró que “esto es un entrenamiento para enfrentar cualquier tipo de situación. Pedimos esa comprensión, no hay desabastecimiento de otros productos. Tendremos algunas afectaciones en la movilidad de alimentos, en la transportación obrera y pública, en la generación eléctrica en los horarios de mayor demanda; si eso lo logramos aplanar podemos lograr que con la generación térmica no haya apagones, pero si tenemos que apagar se dirá a la población”.

“Hasta el domingo no se deben producir interrupciones, y si sucede puede ser por otras causas. Vamos a tener un plan de información de los apagones, si hay que hacerlo, pero no con las horas ni la intensidad del Periodo especial, y se trabaja en función de eso”.

En cuanto a las orientaciones en la actual coyuntura, el presidente cubano insistió en la austeridad y el ahorro. “Vamos a ajustar los niveles de actividad para paliar la situación, asegurar el suministro de combustible para estabilizar la situación. Es necesaria una mayor eficiencia en la cadena puerto-transporte-economía interna para garantizar la movilidad de productos”.

En la actual circunstancia −continuó explicando Díaz-Canel−, se imponen medidas como la planificación eficiente de los medios de transporte, desplazar los picos energéticos y usar medidas del Periodo especial, paralizar algunas actividades y redoblarlas cuando se supere esta situación, pues queremos cerrar el año con un crecimiento del PIB. Otras medidas serían el desplazamiento del horario de entrada en los centros de trabajo y reducir los gastos de combustible y electricidad.

“Se ha definido qué inversiones continuarán y cuales se desplazarán”, dijo, y subrayó la voluntad de mantener los programas de informatización, transporte, turismo, y −enfatizó− todo lo referente a los valores:

Tenemos que hacer que todo el mundo sea sensible, que se multiplique la solidaridad. Todos los carros estatales deben parar en las paradas, entre todos nos debemos apoyar. No subir los precios, pagar nuestra deuda externa en lo posible, descargar de visitas a los territorios para que se concentren en trabajar, dar información oportuna y permanente a la población.

“Los que estén en capacidad de resolver algo, deben hacerlo; no hacerlo es estar en contra del espíritu de la Revolución. Hay que fortalecer la espiritualidad, el civismo, la decencia y el sentido de servicio; enfrentar la burocracia, la desidia; dar buenos servicios, repuestas desde la amabilidad, para ser mejores ciudadanos, mejores revolucionarios, para darle un sello de calidad. Con ese sentido de país, de Revolución, Patria y Socialismo, debemos estar actuando en estos momentos”, sentenció.

Raúl García Barreiro, ministro de Energía y Minas, informó que está garantizado este mes y durante el resto del año el gas licuado del petróleo (GLP) -que se distribuye en la conocida “balita”-, del cual son clientes 1.7 millones de consumidores.

Asimismo, se mantiene sin afectación el suministro de gas natural acompañante de los pozos de petróleo, del cual dependen una parte importante de consumidores (260 000 de La Habana, Mayabeque y Artemisa) para la cocción de los alimentos.

“Este gas, conjuntamente con el crudo nacional, es la base de la generación térmica del país”, precisó el funcionario, y aseguró que “todas las centrales termoeléctricas del país están preparadas para quemar actualmente ese crudo nacional, junto con el gas natural acompañante. Son la base de la generación”.

De acuerdo con el titular de Energía y Minas, también está garantizado el fuel utilizado en las termoeléctricas y en los motores de combustión interna.

García Barreiro destacó que, como parte del programa para el desarrollo perspectivo de las fuentes renovables de energía y la eficiencia energética, hoy funcionan en el país 67 parques solares fotovoltaicos, que garantizan el 2.4% de la generación diurna en el país, mientras que el diésel participa en el 10%.

También se refirió a todo lo que se puede hacer desde el punto de vista del ahorro, tanto en el sector estatal como en el residencial, que consume el 60% y participa en un mayor porcentaje en los picos mayores de consumo (11:00 a.m.- 1:00 p.m. y 6:00 p.m.-10:00 p.m.).

“Ahí tenemos que tratar de adelantar, en el pico de la tarde, algunas actividades antes de que comience el oscurecimiento, para disminuir la demanda de electricidad y lograr una menor participación del diésel en la generación residencial. En cuanto al sector estatal, hay que disminuir los consumos en aquellos lugares donde en esos horarios no sea necesario”, dijo.

“Pensamos que si en ese horario cada vivienda logra apagar un bombillo de 20 watts, se puede disminuir la demanda en 80 mgw, una contribución importante de cada hogar para tratar de disminuir el impacto que podemos tener. Si todos contribuimos, podemos lograr pasar esos días de mayor tensión, casi sin tener afectaciones o con mínimas afectaciones en el servicio eléctrico”, indicó.

Al intervenir en la Mesa Redonda de este miércoles, el ministro de Economía, Alejandro Gil Fernández, refirió que la afectación fundamental será en el diésel, con impacto en la actividad productiva y el transporte. Por eso insistió en que hay que tomar un grupo de medidas en aras de priorizar actividades de amplia demanda en la población.

Aseguró que ninguna de estas medidas ha sido improvisada, sino que se ha venido trabajando en ellas desde hace varios meses, pensando en un escenario donde fuera afectada la entrada de combustible al país.

“Cuando hablamos del encadenamiento productivo, disminuir importaciones, potenciar el desarrollo local, todo tributa a un escenario donde tengamos que explotar más las reservas internas y trabajar en la eficiencia energética”.

Al abordar las principales medidas, mencionó las siguientes:

• Identificar aquellas actividades que se puedan cambiar de horario, principalmente las que sean en horario pico.
• Priorizar el diésel hacia el transporte público y de carga, y actividades destinadas al consumo.
• Evitar el uso del diésel en las inversiones, en la medida de lo posible.
• Centralizar la asignación de diésel, a partir del trabajo colectivo del Consejo de Ministros, para ubicar los recursos en los renglones más importantes.
• Respaldar el 100% del consumo de los servicentros. Los ajustes se están haciendo en el sector productivo.

Gil Fernández comentó que a pesar de esta compleja situación, se trabaja para incrementar el producto interno bruto, con inversiones en la industria y en el transporte, entre otros sectores.

“Esto no se detiene, hay que actuar proactivamente y buscar la manera de ubicar los recursos en los lugares que más lo necesiten. Son batallas que se ganan con el apoyo de la población (…) Todo lo que en estos días hagamos y sea eficiente, lo debemos sistematizar, porque al final tenemos que disminuir el consumo energético y buscar eficiencia en su funcionamiento”, dijo.

Por otra parte, aseguró que el país cuenta con los productos para asegurar la distribución minorista y los recursos a la población.

El transporte, como actividad transversal de la economía, impacta en todos los sectores y, sobre todo, en la población. En esta coyuntura, explicó Eduardo Rodríguez Dávila, ministro de Transporte, se han definido líneas principales:

• Priorizar el uso del ferrocarril, por su alta de eficiencia energética.
• Asegurar la movilidad de combustible, alimentos y exportaciones.
• Mantener la comunicación con la Isla de la Juventud.
• Mantener los niveles de actividad en los puertos.
• Garantizar la canasta familiar normada.
• Reordenar el transporte público y priorizar los servicios médicos.
• Extender la salida de los trenes, “porque todo el mundo no podrá viajar el día planificado”, dijo.
• Se mantendrá un ómnibus diario entre las cabeceras provinciales y La Habana y quien no desee viajar se le reintegrará el valor de su boleto.
• Se rediseñará la transportación pública en los horarios de mayor demanda, y se acortarán tramos de ómnibus.
• Se implementará un sistema de inspectores para persuadir a los choferes de vehículos estatales que no paran.
• Se reforzará el control sobre todos los medios.
• Se trabajará con trabajadores por cuenta propia y cooperativas y taxis ruteros para que se mantengan los servicios.

Al transmitir su mensaje al pueblo, en los minutos finales del espacio radiotelevisivo, el presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel, aseguró que son tiempos de Patria o Muerte, el mundo “nos verá y admirará, en la misma medida en que verá y condenará a nuestros adversarios”.

De acuerdo con el mandatario, todas las premisas y criterios explicados en la Mesa Redonda “se están organizando y en función de su implementación en los planes de cada municipio, provincia, empresa, Organización Superior de Desarrollo Empresarial y Organismo de la Administración Central del Estado”.

En ese sentido, indicó que, de manera previa y en composición completa del Consejo de Ministros, representantes del Parlamento y de organizaciones políticas y de masas, encabezadas por el Partido, todas estas indicaciones fueron abordadas en videoconferencia desde los municipios.

“Tengan la certeza de que se está trabajando en todos los lugares”, puntualizó el jefe de Estado, y aseguró que la mejor respuesta la va a dar el pueblo.

“Nos corresponde a todos los cubanos asumir con responsabilidad, solidaridad, sentido de unidad y sacrificio, el enfrentamiento a esta hora de coyuntural situación”, apuntó.

“Hoy tenemos fortalezas que faltaban cuando se inició el Periodo especial, pero lo que no cambian son los principios, la creatividad, la solidaridad y la voluntad de resistir. Seremos mejores cuadros, ciudadanos, revolucionarios y servidores de la nación, mientras más soluciones encontremos en la extraordinaria reserva de talento de nuestro pueblo”, afirmó.

En otro momento, recordó al Comandante de la Revolución Juan Almeida Bosque, de cuya desaparición física se cumplen 10 años.

Al rememorar la frase de Almeida cuando gritó: ¡Aquí no se rinde nadie…!, Díaz-Canel aseguró que una vez más se le asestará una contundente derrota a los planes y los anhelos del imperio.

“Pensando en él, en su espíritu y forma de enfrentar la vida, quiero afirmar que esta Revolución no va a dejar de ser contada, ni cantada, porque ni nos vamos a amargar la vida, ni vamos a perder el sueño”, sostuvo.

“Nuestro pueblo seguirá siendo feliz, laborioso, creativo, alegre y bromista -incluso en las situaciones más difíciles-, porque somos un pueblo que no se deja amilanar por nada ni por nadie, y con optimismo renovado vamos a encontrar soluciones”.

Este jueves, con la presencia del presidente Díaz-Canel y varios ministros, se ofrecerá en la Mesa Redonda información adicional sobre la actual situación energética y las medidas para afrontarla en cada sector.