Donald Trump: Un presidente de marcha atrás
El lugar, idóneo: el edificio que lleva por nombre Centro Ronald Reagan, uno de los presidentes que fomentó las guerras sucias bajo el nombre de «guerra de baja intensidad».
El lugar, idóneo: el edificio que lleva por nombre Centro Ronald Reagan, uno de los presidentes que fomentó las guerras sucias bajo el nombre de «guerra de baja intensidad».
Las relaciones entre Cuba y Estados Unidos han retrocedido apreciablemente. Si el gobierno de Trump no ha logrado demoler, o reducir a casi nada, los avances logrados por los presidentes Raúl Castro y Barak Obama.
El Petro tiene todas las oportunidades para poner al mercado de monedas digitales a sus pies. Las reglas con las que se programe el activo digital venezolano deberán respetar los mejores estándares de la comunidad de criptomonedas para generar confianzas y seguridad.
Esta nueva ley deroga la promovida por Barack Obama en 2015, que tenía como eje central la “Neutralidad de la Red” y los subsidios a las tarifas a las familias de bajos ingresos.
El 17 de diciembre de 2014 los presidentes de Cuba y Estados Unidos, Raúl Castro Ruz y Barack Obama, respectivamente, hicieron un anuncio que conmovió a la opinión pública mundial: luego de 18 meses de conversaciones secretas, ambos gobiernos habían acordado restablecer relaciones diplomáticas y avanzar en el arduo camino hacia la normalización de las relaciones.
Cerca de un centenar de politólogos y expertos en las relaciones entre Cuba y Estados Unidos estaban reunidos en La Habana el 16 de diciembre de 2014. Ninguno de ellos previó lo que acontecería al día siguiente. Los presidentes Barack Obama y Raúl Castro anunciaron simultáneamente, en televisión, que ambos países intentarían dejar atrás medio siglo de confrontación y buscarían una relación bilateral más civilizada. El mundo aplaudió.