Cuba, ataques sónicos y la guerra de los mundos de Donald Trump
En inglés se le llama hot air, aire caliente, al modo de hablar incoherente y hueco con el que se pretende confundir al otro. En español, tenemos una palabra más gráfica: cantinfleo, que está a punto de quedarse corta para los voceros estadounidenses que intentan extender más allá de la insensatez esa historia de los supuestos «ataques sónicos» en Cuba. Y la trama, deberían reconocer, ya no da para más.