Hacia los 325 años de la fundación de la Ciudad de Matanzas

Desde hace varios meses las labores de construcción en la ciudad de Matanzas toman un ritmo vertiginoso. Restaurar la ciudad constituye hoy una prioridad para devolver a los yumurinos una urbe renovada, digna de celebrar sus 325 años de fundada.

Sin embargo muchos matanceros se muestran preocupados ante la ausencia de accesos a varios espacios públicos o la existencia de barreras que restringen el paso de personas con limitaciones físico motoras, obstaculizando así su derecho a acceder libremente a instituciones, aceras y otros sitios de interés, hecho que sin dudas atentan contra la inclusión social de las mismas.

¿LIBRE ACCESO?

“Me he sentido sumamente frustrada en varias ocasiones a causa de las barreras arquitectónicas en varios lugares de la ciudad como los bancos, las tiendas, incluso en instituciones donde se imparten cursos de superación a los cuales no he podido asistir precisamente por la difícil entrada al local.” comenta Dayle Sánchez, miembro de la Asociación Cubana de Limitados Físico Motores.

Desde 2006 la Organización de Naciones Unidas aprobó la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad ratificada por nuestro país. El documento rige no solo los derechos y deberes de los estados firmantes para con las personas discapacitadas, sino que también presta especial atención a cuestiones como movilidad de las personas, su habilitación y rehabilitación, la participación en la vida política y pública y la accesibilidad de las mismas a los diferentes espacios de interés.

“Sabemos que lograr que se respete la accesibilidad de las personas con discapacidad al medio físico, es una tarea de primer orden en nuestro país y a nivel internacional.

“Nuestra ciudad por sus características es bastante antigua, con construcciones y estructuras difíciles para eliminar en su totalidad las barreras arquitectónicas, sin embargo pienso que en los diferentes lugares donde se está trabajado, resulta fundamental que se tenga en cuenta la Norma Cubana de Accesibilidad, una norma muy bien diseñada que garantiza precisamente la inclusión de las personas con discapacidad y permite el ahorro en materia económica”, enfatizó a Girón Julio César Abreu Falcón presidente de la ACLIFIM en Matanzas.

Durante un recorrido por sitios de interés económico y social, se pudo constatar la existencia de violaciones la regulación antes mencionada que establece el modo de acceso a los diferentes locales. Por ejemplo sobresalen numerosos casos donde las rampas se encuentran bloqueadas por construcciones posteriores, y otros tantos en los que no se tiene en cuenta la estructura del lugar lo cual dificulta su función.

En este sentido debemos destacar principalmente los sitios comerciales, la Calle Medio por ejemplo constituye uno de los espacios más complejos para las personas con discapacidad, tanto en los establecimientos que se encuentran en ella, como por las aceras, construcciones que excluyen a los discapacitados.

CONSTRUIR PARA INCLUIR

Otra de las preocupaciones de algunos afiliados de la ACLIFIM en Matanzas resulta el rescate del adoquinado de las calles como parte del Plan Matanzas 325, teniendo en cuenta lo complejo del traslado en las sillas de ruedas a través de las calles con esta particularidad.

En este sentido Leonel Pérez Orozco, conservador de la ciudad ofreció detalles de las perspectivas con respecto a esta inquietud: “En el caso del adoquinado de las calles, sabemos que resulta complejo para las personas con discapacidad. En estos momentos estamos trabajando justamente en ello, tratando de nivelar los adoquines hasta lograr una estructura no obstaculice su tránsito por la ciudad.

“El Plan Maestro que estamos ejecutando contempla perfectamente los accesos e incluye por supuesto volver sobre la marcha, rectificar todos estos errores que sabemos todavía quedan en algunos sitios, atendiendo a la norma.”

Según explicó el conservador ya se han dado pasos significativos como es el caso del Teatro Sauto donde ya se pueden apreciar dos ranflas de acceso, que si bien no se ajustan en su totalidad a las normas, constituye un paso de avance hacia el objetivo y el deber de incluir a toda la población en los espacios culturales de la ciudad. Asimismo en la oficina del conservador se prevé la construcción de la rampa de acceso desde la Plaza de la Vigía hasta el interior del edificio.

“Como organización hemos entregado a la Oficina del Conservador la Norma Cubana que garantiza el cumplimiento de estas regulaciones y tratamos de alertar y capacitar a la población en este sentido. Creo que no es suficiente pero por lo menos alerta e instruye a todos los matanceros”, resaltó Abreu Falcón.

Se trata de un tema sensible que abarca a un grupo significativo de la sociedad, por lo cual requiere toda la atención por parte de las autoridades que intervienen en este proceso.

De igual modo urge encontrar soluciones a corto plazo para garantizar que este sector logre acceder a los establecimientos económicos e instituciones educativas y culturales de manera fácil y segura.

“Estamos conscientes de la importancia del Plan 325 pero creemos que debe ser una restauración para todos los matanceros incluyendo a las personas con discapacidad, es un derecho que tenemos y un deber de las instituciones implicadas en garantizarlo.” afirmó Abreu Falcón.

(Tomado de Girón)